¡Hora de moverse!

Entrevista con Christine Bastin

Además de coreógrafa, es también cofundadora y directora artística de La Fabrique de la Danse. ¿Podría decirnos algo más?
Christine Bastin ‑ La Fabrique de la Danse es una start-up cultural, una incubadora de coreógrafos. Ayuda a estos artistas a vivir de su arte e inventa soluciones para respaldarlos en su trabajo de creación. La Fabrique de la Danse les permite presentarse ante todo tipo de público y encontrar su lugar en la sociedad. Desarrolla programas pedagógicos y herramientas innovadoras para coreógrafos y jóvenes. En 2017, el proyecto DanceNote gozó del reconocimiento de la fundación Jean-Luc Lagardère, que concedió a su creadora, Lucie Mariotto, el premio al Mejor Creador Digital.

¿Puede hablarnos del proyecto DanceNote?
CB ‑ DanceNote es una herramienta de vídeo especializada para danza que permite a bailarines profesionales y aficionados por igual grabar y documentar sus movimientos. A través de un espacio en línea personal y seguro, los usuarios van recabando todos los elementos de una creación: vídeos, música, fuentes de inspiración… y anotan sus movimientos. Esta plataforma es una herramienta de trabajo y puesta en común que los adolescentes van a descubrir en el Studio 13/16.

¿Qué descubren y experimentan los adolescentes a lo largo de este proyecto?
CB ‑ Aprenden qué es la «escritura coreográfica» y descubren la increíble variedad de estilos y movimientos que ofrece la danza en la actualidad. Experimentan con herramientas innovadoras como una combinación tridimensional que interroga la forma de transmitir un movimiento o la plataforma DanceNote. También descubren vídeos que narran la historia pasada o reciente de la danza y la acción artística, y se ven movidos a reflexionar sobre el gesto y su huella asociando el cuerpo y la materia. Por último, van a crear y a participar en talleres, bajo la dirección de los cinco coreógrafos que irán pasando por el Studio 13/16. «¡Muévete! » termina con una fiesta bailada, en la que cada participante se hará asistente de los coreógrafos e iniciará al público en la danza.

¿Qué espera de este taller?
CB ‑ Esperamos que cada participante descubra la inmensa alegría que reporta la danza, primero para uno mismo, porque nos revela cómo somos, y después por el placer sentirla todos juntos. Nos gustaría que, durante unas semanas, el Studio 13/16 pueda transformarse en un lugar donde reconectemos con nuestro cuerpo, nuestras emociones, lo sensible y lo poético.

Entrevista realizada por Claire Cousin y Alexandra De Bouhellier

Directoras de proyecto, Dirección de Públicos, Centre Pompidou

In Code couleur n°34, mayo-agosto 2019, p. 42